Esta semana ando muy liado pero he sacado tiempo para hacer fotos a este irresistible postre segoviano. Es curioso, los mazapanes no me gustan, los odio, me dan mucha rabia cuando te invitan a una casa en navidad y te sacan los mazapanes en formas de animales, objetos o cualquier otro tipo de forma absurda. Ademas los cogí manía cuando en la escuela de hostelería de Burgos al profesor no se le ocurrió otra cosa que hacer millones de mazapanes para después venderlos y sacarnos un dinero para el viaje de fin de curso... al cual no fui.
Pero un día me dieron a probar el Ponche Segoviano, la verdad que yo no conocía su existencia y lo probé la verdad que me encanto. Es una tarta de bizcocho y crema cubierto de una fina de mazapán Entonces me di cuenta que la idea que habían tenido los segovianos de camuflar esa masa a base de almendras era muy buena. Desde entonces la única manera en la que mi organismo digiere el mazapán es en forma de esta maravillosa tarta.
PD: Gracias Silvia por traerme el Ponche, de hecho ya esta terminado!!!
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